La vida me ha enseñado que lo más importante no es querer a alguien, sino ser alguien a quien valga la pena querer. Me ha enseñado que la lucha siempre genera sus frutos; que una sonrisa moviliza a más personas que un millón de lágrimas y que ser fuerte no es cuestión de dureza, sino de coraje. De la valentía, la vida me ha enseñado que no consiste en no tener miedo, sino en tenerlo (cuanto más mejor) y que, pese a ello, sigas adelante. Esta vida me ha enseñado que coger una mano es algo maravilloso, pero que conservarla para siempre es lo más grande. La vida me ha enseñado que la verdadera función de los sueños no es soñarlos, sino vivirlos. He aprendido, gracias a lo que la vida me ha enseñado, que conseguir lo que quieres es grandioso pero que, mantenerlo a lo largo del tiempo es realmente mágico. La vida me ha enseñado que el amor es el mejor sentimiento del mundo y que cualquier cosa que traiga dolor no puede ser llamada amor. La vida me ha enseñado que la envidia destruye al envidioso y resalta la grandeza del envidiado. Algo muy importante que también me ha enseñado la vida es que el mejor indicador del valor de alguien es la calidad (y no cantidad) de la gente que les rodea. A base de golpes, la vida me ha desvelado que la traición y el engaño existen, que el camino es tortuoso y muchas veces oscuro, pero que si has sabido cómo vivir, siempre hallarás la luz en las personas que te acompañen. En esta vida he aprendido que los sabios aprenden de sus errores pero que, en cambio, los genios aprenden de los errores de los demás; que la debilidad no es cosa de débiles sino de los más fuertes, pues es en ellos en donde residen las grandes almas y que lo más importante es confiar en uno mismo. La vida me ha enseñado, además, que los límites no existen y que somos nosotros, aterrados, quienes elegimos dónde y cuándo ponerlos. La vida me ha enseñado que, al contrario de lo que pueda parecer, existe más gente buena que mala, aunque también me ha enseñado que el mal hace más ruido. He aprendido que lo que callamos no cuenta, que no existe, y que lo que decimos nunca se olvida. Y que la sonrisa de un niño es la mejor medicina.
Y sobre todo, la vida me ha enseñado que es bella, que vale la pena vivirla y que siempre tendrá algo que enseñarnos.
Fatima qué tal? te escribo para decirte que este sabado pasado "esa persona" volvió a mi vida, me llamó por teléfono y todo genial, por motivos ajenos a nosotros no podiamos quedar hasta principios de marzo y él lo vio todo genial...parecia que había cambiado... hasta el punto en el que me dijo que ahora ya estaba seguro de que era yo la niña que quería en su vida.... :$ pues bien, en un plazo máximo de dos dias todo cambió...me dijo que lo que me habia dicho el sabado era porque en ese momento lo sentia asi, pero que habian pasado lod dias y se daba cuenta de que no era asi ...todo esto despues de 3 meses que no tenia ninguna necesidad, no crees? me dijo que yo no queria quedar con el porque yo estaba tan sumamente enamorada de el que no aceptaba un no por su parte :O y que el tenia que quedar para ver como se sentía!! por favor... tú ves algo de cordura en esto?
ResponderEliminarHola guapa! Perdona por tardar, pero voy liadísima y además las notificaciones de comentarios no me llegan a ningún sitio :/ Pero te contesto ya, a ver si te sirve de algo porque ya ha pasado mucho tiempo...
EliminarMira, yo creo que lo peor que se le puede hacer a una persona es llenarla de incretidumbres. Es un coñazo estar todo el día en vilo: ahora sí, ahora no, hoy me quiere pero, y mañana? No permitas que jueguen así contigo. Nadie se lo merece y, según veo, tu menos aún. A menudo la gente a la que amamos se aprovecha de nuestros sentimientos para hacer y deshacer a su antojo; nos convierten en marionetas de sus vidas. Cada uno debe tener claro lo que quiere y, más aún -como he escrito por aquí en alguna ocasión- lo que NO quiere...y apuesto a que tú no quieres estar así, dos días bien, tres mal, cuatro bien y tes meses nada. Mi consejo es que olvides a esa persona, no le des el poder de hacerte sufrir y pasar malos ratos. Ignóralo, ya sabes que no hay más desprecio que no hacer aprecio. Y no te preocupes, porque si realmente es "tu persona" hará lo que debe para recuperarte, pero tú no muevas ni un dedo más!
Un beso!
Hola Fátima! Ya he vuelto por aquí! He estado desaparecida, perdona, pero ya nacío mi pequeño! Estoy taaaan feliz! No creía que fuese a llenarme de esta manera, de verdad! :)
ResponderEliminarAhora me encuentro súper positiva, súper llena de energía y de ganas de ver mundo, así que me encanta tu texto, no sé con qué tono y ánimo lo escribirías, pero a mi me sale leerlo con garra y fuerza, y me encanta! (cosas de los blogs, que no terminas de captar el tono con el que se escribió)
Muaaak!
ENHORABUENAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!! Es lo mejor que le puede pasar a una mujer en su vida. Bueno, no, lo mejor es tener MUCHOS MUCHOS MUCHOS bebés! :P
EliminarPerdona tú, pero como ya le he dicho a Paula, no voy muy bien de tiempo y además no se me notifican los comentarios del blog! Bueno, además de la SÚPER enhorabuena, decirte que has captado perfectamente el tono y ánimo de mis posts. Sigue viendo mundo y disfruta muchísimo de lo que tienes!!
Un beso para los dos! ;)